El mundo necesita una mejor solución para la depresión, la ansiedad y la demencia
La depresión y la ansiedad están en proporciones epidémicas. Los trastornos de ansiedad son la enfermedad mental más común en los EE. UU. y afectan a casi el 20% de la población adulta, y la depresión afecta a más de 18 millones de adultos (una de cada diez personas).
Y la respuesta del mundo médico convencional a esta epidemia es muy específica; drogas sinteticas.
Los antidepresivos son el fármaco más recetado en EE.UU. después de los antibióticos – tomado por más de 1 de cada 10 estadounidenses (y 1 de cada 4 entre mujeres de 50 a 64 años). Muchos creen que este es el mejor tratamiento para la depresión, pero estudios filtrados, incluso de los propios fabricantes, han demostrado que estos medicamentos son por lo general no produce más beneficios que un placebo.
La inflamación es una forma esencial en la que defendemos nuestro cuerpo de infecciones y organismos invasores. Desafortunadamente, como ya sabrás, este proceso a menudo se vuelve loco.
Los científicos han relacionado la inflamación crónica de bajo grado con muchas causas de muerte modernas: enfermedades cardíacas, cáncer y otras. Pero aquí hay algo que quizás no sepas...
Un estudio publicado en 2013 en el Journal of Neuroinflammation descubrió una fuerte correlación entre las enfermedades psiquiátricas (incluida la depresión) y la inflamación en el cerebro. Los investigadores están encontrando niveles elevados de sustancias químicas proinflamatorias en el torrente sanguíneo de personas que padecen trastornos del estado de ánimo y otras enfermedades mentales.
Estados Unidos tiene la segunda tasa más alta de Alzheimer y demencia del mundo, mientras que India tiene una de las más bajas. ¿Qué podría estar causando esta drástica diferencia entre estos dos países? La respuesta es la curcumina, un componente activo de la cúrcuma.
Curcumina es un potente antiinflamatorio que se ha demostrado en estudios que disminuye la inflamación tanto aguda como crónica. También se ha demostrado que reduce el estrés oxidativo. Dado que los medicamentos antiinflamatorios (AINE) se han relacionado con un riesgo reducido de Alzheimer, la cúrcuma promete tener la posibilidad de producir resultados similares sin los efectos secundarios.
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